La calle Asunción

 

La calle Asunción tiene siete nombres distintos. Para los del Barrio Sur se llama Ismael, para los artistas de la avenida se llama Itaipú, para los barberos de Ayacucho y Vieytes siempre ha sido Honorio Paredes. Los empleados de las tiendas de regalería, la conocen por Arévalo, los vendedores de Larralde y Pampa le dicen Del Talar, los transeúntes la conocen por Charquis, y los del Barrio Este la llaman Mendoza. Solo quien no vive en las cercanías de Asunción, la conoce por su nombre.
Es muy sabida, la historia de aquel extranjero que intentó llegar hasta Asunción al 2500, preguntando a los barberos de Ayacucho, en las tiendas de regalería, y a los transeúntes que frecuentaban el lugar. Ninguno conocía la calle que estaba buscando. El mapa que tenía en su celular, le decía que estaba en el sitio correcto, pero increíblemente, los nombres de la calle cambiaban a medida que preguntaba. Intentó de mil maneras llegar al lugar que buscaba, pero todo fue en vano. Quizá el azahar y el destino no estuvieron en el sitio correcto, o quizá Asunción, siempre ha sido el invento de alguien, más allá de los ojos de aquel barrio.

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